Bienvenido a mi carrera surrealista. Todo lo que cuento aquí es real, tan real que me habría muerto si no me lo tomara con humor. Si alguna vez dejo de publicar sin dejar señas es que me han identificado y linchado.

miércoles, 17 de octubre de 2012


Este curso está siendo soso, soso...pero creo que en seguida Ingeniería Sanitaria se ganará el pase.

Segundo de ICCP
Asignatura: Topografía.

Bueno, pues que por primera (y ha resultado única) vez en la carrera, que nos llevaban de visita ¡bien! A la presa de Alba ¡bien, una presa, no una depuradora inmunda! Y en casi verano ¡calor, bien!
-Bueno chicos, pues que os llevéis la crema para el sol y buen calzado que hay víboras en la zona.
Caras de pánico entre el público femenino. Víboras. Yo creo que nos imaginamos con salacot y machete y unas hierbas por las rodillas. Así que allí vamos todos en nuestro autobús cantando canciones de campamentos con voz temblorosa y soportando el insultante optimismo de nuestro profesor que hizo su aparición con unas endebles zapatillas. Nosotros con vaqueros y botas y casi casi bufanda no fuera que nos saltaran al cuello (y treinta grados).
Pero oh, maravillas de la técnica, aquello era un camino de grava y unas escaleras de hormigón. La vegetación quedaba abajo en el valle donde no nos iban a dar la opción de detenernos y por muy ecologistas que pudiéramos ser, todos respiramos aliviados mientras nos apelotonábamos en la puerta de la galería (porque sí, a una presa se puede entrar de forma literal).
-Oye, que somos muchos, así que casi que la mitad se quede fuera y espere un poco para entrar.
Pues allí que nos quedamos en unas escaleras de medio metro de ancho, a pleno sol y todos bien pegaditos al paramento pulido y limpio escuchando las indicaciones del director cuando aparece el guarda de seguridad (no, nadie se había dado cuenta del grito que se había oído). Sale al exterior, los ojos cegados por la luz, el buzo rojo, la coleta y el pendiente…y la víbora muerta en la mano. Y que la lanza allí mismo y con las mismas que se vuelve al interior. A por más.
Aclararé que la galería de una presa tiene muy pero que muy poca anchura y altura. En plan La gran evasión, vamos. Tampoco hay demasiada luz.
-Bueno chicos, pues yo creo que podemos ir entrando…

martes, 18 de septiembre de 2012

Otro año más...

No sé vosotros, será que no soy de letras, pero para ser la propaganda de la academia de apoyo me parece un eslógan un tanto contraproducente XD
Por cierto que llevo varios días tratando de recordar que encontré la primera cana la semana pasada...y hoy me he arrancado la segunda.

martes, 11 de septiembre de 2012

Los comienzos de curso

 ¿Curso quinto?

Estaba yo el otro día ahí haciendo cola para un helado de mora y nata, apurando al límite los últimos días de este verano cuando me encontré con un profesor que me dio clase hace tres años, en segundo. Aquí la menda no solo va a curso por año (más o menos, que sé que esto lo leen conocidos cercanos y seguro que me recuerdan que...bueno, que algún día debo hablar de metálicas), sino que además es de Diciembre, osea que soy siempre de lo más jovencito en las asignaturas. Total que allí estaba yo dispuesta a mantener una amena conversación sobre estos magníficos recortes y la infatigable persecución de Bolonia cuando me estrené en Septiembre de la siguiente manera:
-¡Hombre! Hola Mandarina ¿Qué tal? Ya andarás con el proyecto, claro.
-Qué va, hombre- sí, los dos somo mucho de llamarnos hombre-. ¡Si empiezo quinto ahora!
-Ah, eres más jovencita de lo que pareces...

Más. Jovencita. De. Lo. Que. Pareces.
A partir de ahora pienso ir siempre con un moño bien tenso, para ver si disimulo las arrugas que personajes cómo él contribuyen a cincelar.
(Y eso que soy de los pocos que aún no ha localizado una cana...en cuanto lo haga, os lo cuento)

martes, 12 de junio de 2012

Frases sueltas

Momentos breves, apenas alcanzados a ser garabateados en la parte de atrás de los apuntes para que pasen a la posteridad. Solo disfrutados por los que con una oreja seguimos procesando el discurso.

Curso primero.
Asignatura: electrotecnia.

"A ver chicos, normas de seguridad. [...] Y si alguien se electrocutara, sobre todo no le toquéis porque os podéis quedar conectados en paralelo"

En paralelo, chicos, importante.

Curso segundo.
Asignatura: Geología.

De verdad, de verdad que no os hace falta saber lo que es un acuífero, pero esta fue la brillante comparación de nuestro geológo predilecto.

" Tú estás un sábado de fiesta y tienes un cubata en la mano. Entonces lo inclinas así. ¿Qué ves?"
Entonces se oyó una vocecilla, baja pero clara y sobre todo, correcta. "Dos cubatas"

Tío...yo no bebo, pero tú ¿qué has desayunado?

Curso segundo.
Asignatura: Geotecnia y cimientos.

"Os voy a explicar el concepto de potencial. ¿Con qué queréis que lo haga? Otros años lo he hecho con gatos, conejos, con cerdos o con tetas."

Creo que nos tocó conejos. Una especie de horda de cabezas de conejito hasta con bigotes. Los tíos se quedaron decepcionados.
Que nadie me pregunte nunca el concepto de potencial.

lunes, 4 de junio de 2012

Alphas y thetas

Curso segundo.
Asignatura: Ingeniería hidráulica e hidrológica.

Comenzaré por aclarar que en esta carrera se utiliza para todo la letra griega θ. Teta. O tita o alpha, claro, pero solo porque tenemos profesores que también llaman alpha a esto γ o a esto λ. Para todo, ángulos, rozamientos…ah, el rozamiento. Bueno, que para todo, que si tu vas al baño en la politécnica seguro que al cerrar la puerta si levantas la vista ahí está, una θ enorme grabada en el interior.
El caso fue que tantos profesores la llamaron no del todo correctamente tita. O zeta. (O alpha)
Y entonces llegó el de hidráulica, un sol de hombre, os hablaré más de él pero requiere esta entradilla. Allí estábamos todos en nuestras sillicas (que son unos bancos de tortura sobre los que seguro me oiréis hablar) apretujadas deseosos de aprender un poco más sobre tuberías cuando desplegó un papel y con una media sonrisa requirió nuestra atención (repito: un sol de hombre).

*Esto es breve, brevísimo resumen de cómo recuerdo el discurso puesto que aqullo se extendía más de medio folio en el mismo tono pero por no aburrir, me quedo con lo importante*

—    Bueno, quería leeros una carta que me dejaron el otro día en el buzón. Dice lo siguiente: ‘Esta letra griega – se veía en la hoja el símbolo en un tamaño de por lo menos cincuenta- se llama teta. TETA. No tita ni zeta. Teta. No entiendo por qué todos lo cambiáis con vuestros prejuicios ¿Es que eres tan sucio de mente que no puedes llamarla por su nombre sin pensar mal?’ Bueno, de acuerdo, así que a partir de ahora la llamaré teta y siento…siento si a alguien le ha molestado- otra media sonrisa.
Calculo que alrededor de cien caras incrédulas, demasiado atónitas para reír. No nos quedó claro hasta qué punto llegaba la ironía.
Lo que sí nos quedó claro es que semanas después, cocidos en una clase práctica de cálculo con muchos ordenadores que no tenían nada que envidiar a la máquina de vapor de Watt, el profesor de dicha asignatura se corrigió a si mismo diciendo teta y luego aclaró que “al parecer había gente a la que le molestaba la equivocación”.
Nos seguimos preguntando a cuantos profesores más les llegó la hoja. Y sí, bueno, en realidad se llama theta, sí, sí, con hache. Ante la duda…alpha.

miércoles, 30 de mayo de 2012

Los pollos escapistas

Cuarto de ICCP 
Asignatura: Sistemas de Transporte. Salida del examen final


Aclararé que este ha sido uno de los peores años de mi vida. El peor. Asignaturas, profesores…se ha juntado todo. Incluidos cuatro exámenes en cuatro días. Cuarto de carrera. Brillante. Y entonces hoy, dando por perdidos ya dos de esos cuatro, he entregado un tercero en blanco por primera vez en mi vida y me he arrastrado fuera pestañeando ante un sol desconocido…cuando he visto no uno sino dos, dos pollos de picaza que habían caído del los nidos que hay en los árboles que rodean la politécnica.

Aclararé varias cosas para poneros en situación:
•    Los pájaros no me apasionan. Tienen pico. Pican.
•    Las picazas (urracas) me apasionan muy poco dentro del conjunto pájaro. Pero se emparejan fielmente y solo tienen un pollo a la vez al que cuidan los dos padres.
•    Nunca, NUNCA he cogido un pájaro. Siempre que hemos rescatado un pollo he tenido un adulto responsable (madre, tía, novio) para echarle mano.

Total que allí me veo en la tesitura de condenarlos a una muerte segura o armarme de valor y echarles mano. Diviso a una amiga cuya ayuda requiero. Error. Bueno, me deja su cazadora para usarla como lazo (gracias) pero en vez de ayudar a arrinconarlos cada vez que el pollo la mira, ella grita y huye.
Como consecuencia me paso media hora persiguiendo dos pollos enfadados a pleno sol y con los padres piando desesperadamente desde arriba.

El director de la politécnica me ve y me mira inexpresivo para después desaparecer como que no me conoce (me dio clase).
El de economía de segundo me dedica una sonrisa a medio camino entre la guasa y el ánimo.
Él de física de primero opta por reconocerme y mirar el pollo que estrujo entre las manos. Y reírse. Al menos me dirige la palabra, bien!.

El caso es que cuando he logrado devolvérselos a los padres me he dado cuenta de que no solo los he perseguido por el patio al que da la biblioteca si no que los he placado contra la cristalera de salida de las aulas donde había bastante, BASTANTE gente.
 He preferido desaparecer deprisa. Menos mal que ya no hay clase.